25.03.09 -J. PASTOR. JAÉN
Las ideas ya están plasmadas negro sobre blanco. Ahora 'sólo hace falta' llevarlas a la práctica. Y es que para que el aprovechamiento de la biomasa del olivo sea un negocio para los 108.000 oleicultores de Jaén hace falta que confluyan dos circunstancias que en estos momentos no se dan: que haya centros de transformación a no más de 30 ó 40 kilómetros de las plantaciones (ahora mismo el más cercano se localiza en Puente Genil, Córdoba, a 117 kilómetros de la capital jienense) y que el precio de la tonelada de poda cueste, al menos, 50 euros. Éstas son las principales conclusiones del estudio 'Desarrollo de un modelo de gestión de la biomasa procedente de los restos de la poda del olivar en la provincia de Jaén', elaborado por la UPA y que se presenta ahora, coincidiendo con la celebración de la feria de las energías renovables Bióptima.
Las ideas ya están plasmadas negro sobre blanco. Ahora 'sólo hace falta' llevarlas a la práctica. Y es que para que el aprovechamiento de la biomasa del olivo sea un negocio para los 108.000 oleicultores de Jaén hace falta que confluyan dos circunstancias que en estos momentos no se dan: que haya centros de transformación a no más de 30 ó 40 kilómetros de las plantaciones (ahora mismo el más cercano se localiza en Puente Genil, Córdoba, a 117 kilómetros de la capital jienense) y que el precio de la tonelada de poda cueste, al menos, 50 euros. Éstas son las principales conclusiones del estudio 'Desarrollo de un modelo de gestión de la biomasa procedente de los restos de la poda del olivar en la provincia de Jaén', elaborado por la UPA y que se presenta ahora, coincidiendo con la celebración de la feria de las energías renovables Bióptima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario