Los padres del Ramiro de Maeztu y los del José María Pemán dicen que sus hijos no irán a clase hasta que no se traslade a dos docentes que consideran perjudiciales.
La vuelta al cole en Puente Genil se ha presentado con convocatorias de huelga indefinida en los centros educativos Ramiro de Maeztu y José María Pemán. Así, la Asociación de Padres y Madres (AMPA) del colegio Ramiro de Maeztu ha decidido que ningún alumno del centro asista hoy a clase hasta que la Delegación Provincial de Educación no sustituya a la educadora de los escolares con necesidades de atención especial. Por una resolución judicial, esta docente ya estuvo suspendida el año pasado de empleo y sueldo durante nueve meses por la comisión de tres faltas graves como la no recepción a los niños con discapacidad del transporte escolar, impuntualidad e insultos al director del centro.
Desde el AMPA han manifestado a El Día que tenían el compromiso de la Delegación de Educación de ofrecer una solución a este problema, sin embargo, el día del regreso a las aulas ha llegado y la misma educadora ha vuelto al colegio tras cumplir el periodo de suspensión que se le había impuesto. Los padres y madres del colegio Ramiro de Maeztu solicitan a la Delegación que sea una monitora la que sustituya a la educadora, ya que entienden que su incorporación puede ser "perjudicial para los niños generando, además, un ambiente enrarecido y tensión en el colegio".
Por su parte, en el colegio José María Pemán, tampoco asistirán a clase los 24 escolares de cuatro años del aula B, pues desde el AMPA también se pide el traslado de la profesora de apoyo, debido a los comportamientos de "apatía y agresividad" que los escolares comenzaron a mostrar el curso pasado mientras estaban con esta maestra. Según el AMPA, esta docente para la que piden el traslado sustituyó el año pasado a la profesora titular, que se dio de baja por maternidad. A raíz de los problemas generados, la maestra de apoyo tramitó un traslado por comisión de servicios, sin embargo, parece que el documento "se ha traspapelado en la Delegación no pudiéndosele conceder la petición", indicó el presidente del AMPA de Pemán, Juan Miguel Granados. Ahora, las madres de los alumnos afectados se niegan a que sus hijos asistan a clase hasta que no se resuelva esta situación.
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